La regla de oro de la nutrición es desayunar en abundancia,
almorzar una cantidad moderada y cenar lo mínimo posible, y es esta regla la que
nos llevará hacia el buen camino en la mayoría de los casos.
Durante la noche, el cuerpo disminuye el gasto calórico, por
lo que si comemos en exceso durante la cena, esas calorías irán a las reservas
del organismo, haciendo que comencemos a acumular grasas que
luego serán difíciles de quemar con ejercicio.
Igualmente si usted está buscando aumentar el volumen
muscular, la cena puede ser de gran ayuda, pero esto solo si se
ingieren alimentos muy ricos en proteínas y bajos en grasas y carbohidratos, y
debió haber un entrenamiento importante durante el día, cosa de que el cuerpo
tome las proteínas y pueda reconstruir los tejidos y con ello aumentar el tamaño
de los músculos.
Es importante recordar que es durante las horas de sueño cuando el cuerpo
repara los tejidos, por lo que si le damos proteínas y alimento
para hacerlo, la tarea de hará de un modo mucho mas efectivo.